TARTA DE QUESO FRÍA
Por fin hoy comparto esta receta con vosotros. Como había comentado anteriormente, la tarta de queso es una de mis favoritas. Voy a ser un poco creída y permitirme el lujo de decir que la que yo hago es la que más me gusta, más incluso que las que pruebo en restaurantes.
Suelo hacerla en el molde grande, pero esta vez lo hice en un molde más pequeño de 18 cm, así consigo tener una capa de galleta más alta y el relleno más alto también. Podéis hacerlo en el molde que queráis, os saldrá igualmente bien.
Es una tarta fría, no va al horno.
INGREDIENTES:
- 1 tarrina de queso Philadelphia, 250 g
- 1 brick de nata de montar, 500 ml (utilizo Central Lechera Asturiana)
- 6 cucharadas de azúcar (puedes hacerlo con azúcar blanco o si tienes Panela también queda bien)
- 1 sobre de gelatina de limón Royal en polvo (no cometas el error de coger la marca blanca, lo probé una vez y la tarta no sabe bien, coge la marca Royal)
- 1 paquete de galletas María
- 150 g de mantequilla o margarina
- Mermelada de fresa o el sabor que más os guste (coge una mermelada de calidad, para que el sabor de la tarta sea aún más increíble)
ELABORACIÓN:
- Empezamos triturando las galletas hasta que queden en polvo. Hazlo en una trituradora si tienes, si no, una buena opción, es meter las galletas en una bolsita, y con un rodillo pasarlo por encima aplastándolas (foto más abajo).
- Ponemos la cantidad de mantequilla/margarina en un cuenco y lo derretimos en el microondas. Hazlo por muy poco tiempo, si no te explotará. Lo echamos fundido encima de las galleta trituradas y mezclamos bien para que se impregnen, nos quedará una pasta.
- Con esta pasta cubrimos el molde, aplastándola con ayuda de una lengua de cocina o una cuchara. Reservamos en la nevera mientras hacemos el relleno.
- En un cazo a fuego medio ponemos la nata, la gelatina y el azúcar, removemos con ayuda de unas varillas hasta que se disuelva e intentamos que no llegue a hervir.
- Apartamos del fuego y añadimos la tarrina de queso Philadelphia. Removemos con las varillas hasta que se deshaga, lo hará fácilmente con el calor residual.
- Una vez batido todo lo incorporamos al molde de la tarta con la base de galleta.
- Cuando se enfríe, lo llevamos a la nevera (deberá estar un mínimo de 6 horas). Pero si queréis acelerar el proceso, una vez frío podéis meterlo como 1 hora en el congelador, cuidando que quede en posición horizontal. Pasado el tiempo, estando frío y solidificado, lo sacamos, añadimos la mermelada y ¡¡listo para probar!! Luego lo devuelves a la nevera.
Como ocurre con otros postres, esta tarta está más rica al día siguiente. Espero que la disfrutes mucho, tanto como nosotros en casa 😊
¡¡Realmente fácil!!
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